JAIME BELDA, PATRIMONIO VIVO DE NUESTRA SEMANA SANTA

Jaime Belda Ecos del Nazareno

Reproducimos íntegramente el artículo de José Francisco López Martínez publicado en la revista Ecos del Nazareno 2024, “JAIME BELDA, PATRIMONIO VIVO DE NUESTRA SEMANA SANTA”

 

Sin lugar a duda, la música es uno de los pilares fundamentales en la singular configuración estética de las procesiones cartageneras. Y lo es, no sólo por la existencia de una nutrida lista de composiciones musicales realizadas exprofeso para nuestra Semana Santa, sino por el papel central y rector que la música desempeña en la propia configuración del cortejo. En ningún otro lugar la música rige y complementa la procesión de una manera tan determinante como en Cartagena, como demuestra el hecho de que la banda de música adopte las vestiduras de cada tercio, fusionándose con él, ocupando el lugar central del cortejo, entre penitentes y trono.

Evidentemente, no hay música sin músicos, y en Cartagena debemos estar agradecidos a los muchos músicos de renombre que han aportado sus composiciones, su interpretación y su implicación para conseguir el carácter único de la procesión cartagenera.

Hoy queremos destacar la figura de uno de esos músicos que, por su papel en la dirección de las bandas de música y su importante labor en la promoción de la enseñanza musical, debemos considerar como lo que se denomina un tesoro vivo en el patrimonio cultural inmaterial que constituye la Semana Santa de Cartagena.

Jaime Belda Cantavella -Cristóbal Halffter.

Nos referimos a Jaime Belda Cantavella (La Font de la Figuera, 1942), músico afincado en Cartagena, de manera definitiva, desde 1982, donde ha desarrollado una gran labor formativa y de impulso de la música en general y, en particular, de la música de banda.

Tras la formación inicial en su localidad natal, en la Sociedad Musical La Lira Fontiguerense, desarrolló, en el Real Conservatorio de Música de Madrid, los estudios de Saxofón, Piano, Contrapunto, Fuga, Composición y Dirección de Orquesta, culminados con las máximas calificaciones.

En 1962 comienza su carrera como músico militar, incorporándose voluntario a la Banda de Música del Regimiento de Infantería Inmemorial nº 1, como saxofonista.

Jaime Belda 2

Era en ese momento Comandante Director de la Banda del Inmemorial, Ricardo Dorado Janeiro, quien conseguiría conformar una gran banda con más de ochenta instrumentistas, desarrollando una gran labor compositiva, no sólo de música militar sino también religiosa procesional(1). De Ricardo Dorado, autor de marchas procesionales como Altare Dei, Getsemaní, Hossanna, o Cordero de Dios, conserva Jaime Belda su método docente manuscrito, además de un imborrable recuerdo de insospechada trascendencia procesionista: Sucedió que un día de aquel 1962, estaba el joven voluntario saxofonista de cabo cuartelero en el Inmemorial cuando el Comandante Dorado, que llevaba toda la mañana encerrado trabajando en su despacho, abrió de repente la puerta y, con su habitual desdén, reclamó al cabo Belda. – «Muchacho: reparte esto y convoca a los músicos para ensayar». Eran las particellas manuscritas de una nueva marcha recién acabada por el maestro Dorado: Mater Mea. De manera que, por los azares del destino, Jaime Belda tuvo el privilegio de ser uno de los instrumentistas que hicieron sonar por primera vez una de las marchas más solemnes de todo el repertorio procesional.

Del Inmemorial, Belda pasaría al Colegio de Guardias Jóvenes de la Guardia Civil, en Valdemoro, donde estaría cuatro años como saxo tenor, hasta que, por oposición, accedió a la Marina, siendo su primer destino, en 1967, la Unidad de Música del Tercio de Levante de Infantería de Marina, en Cartagena. Es entonces cuando tiene el primer contacto con las procesiones de Cartagena, de las que le impresiona el orden pautado por la música, y la luz.

Jaime Belda 1Casado con una cartagenera, recibe un nuevo destino en la Agrupación de Infantería de Marina de Madrid, en 1973, hasta que, por concurso oposición, obtiene la plaza de Teniente subdirector en la Unidad de Música del Tercio de Levante, en Cartagena, en 1982, donde se establece ya definitivamente.

En su etapa madrileña, compagina su destino militar con la actividad del cuarteto de saxofones Adolfo Sax, así llamado en honor del creador del instrumento, a través de su amistad con el maestro José López Calvo, músico conquense que organizó y dirigió la Banda de la Guardia Real, y autor también de memorables composiciones procesionales.

Con el cuarteto de saxofones realiza Jaime Belda numerosos conciertos, a los que aporta algunas de sus composiciones, como la estrenada en el concierto celebrado en el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid, en 1979, con la dirección de Enrique García Asensio. El Cuarteto de saxofones era reclamado para diferentes acontecimientos, y en 1980 fueron los encargados de interpretar un concierto en honor de SS. MM. los Reyes, en el Palacio de El Pardo.

No cesa en su formación Jaime Belda y entre 1977 y1983, participa en los cursos de verano que organizaba en Niza el prestigioso saxofonista Daniel Deffayett, profesor del Conservatorio de París y solista de la Filarmónica de Berlín.

A partir de su destino definitivo en Cartagena, Jaime Belda va a comenzar su labor docente, como profesor de saxofón en el Conservatorio Superior de Música «Óscar Esplá», de Alicante. Es en esa época cuando el cartagenero Benito Lauret crea la Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia, de la que Jaime Belda sería director entre 1983 y 1997, dirigiendo cuatrocientos conciertos.

Su labor como director de orquesta se completa con la fundación y dirección de la Orquesta Sinfónica del Teatro Chapí de Villena, habiendo dirigido también la Orquesta de Cámara de la Región de Murcia, la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia y la Orquesta Sinfónica Estatal de la Radio Televisión de Bielorrusia, en los Encuentros Europeos del X Festival de Primavera de Minsk.

En su faceta de director de banda de música, además de haber estado al frente de la Unidad de Música del Tercio de Levante de Infantería de Marina de Cartagena, ha dirigido a La Lira Fontiguerense, la Banda Primitiva de Lliria, Agrupación Musical Sauces, Unión Musical Torrevejense y Unión Musical Cartagonova, de la que es fundador.

El nombre de Jaime Belda quedará para siempre unido a la promoción de la música de banda en Cartagena con su labor al frente de la Agrupación Musical Sauces y la creación, en 2012, de la Unión Musical Cartagonova, de la que continúa siendo director de la banda y de la escuela de música. Con la Cartagonova, Jaime Belda ha obtenido el Primer Premio en el VIII Certamen Internacional de Bandas de Música Villa de Dosbarrios, certamen en el que fue proclamado Mejor Director, en 2015; Segundo Premio en el 131 Certamen Internacional de Bandas de Música Ciudad de Valencia (2017); Primer Premio en el XXII Certamen Internacional de Bandas de Música Villa de Aranda (2023), donde también mereció el Premio al Mejor Director.Valencia .Palau de la Musica 2017 (2)

La Unión Musical Cartagonova es sin duda el hijo más querido de la labor docente musical de Jaime Belda, una banda que cuenta con un importante número de músicos profesores de conservatorio y miembros de orquestas de distintas ciudades europeas que acuden a tocar con la Cartagonova cuando así se requiere.

Una de esas ocasiones más especiales fue el Concierto de inicio de Cuaresma celebrado en el Auditorio de Cuenca en 2019, por encargo de la Junta de Cofradías de Cuenca y la colaboración de la Asociación Procesionista Tertulia La Vara. En el Auditorio de Cuenca, la Unión Musical Cartagonova se convirtió en embajadora de la música procesional de la Semana Santa de Cartagena.

Concierto auditorio de Cuenca

Es en este campo de la música procesional donde Jaime Belda ha desarrollado una incesante labor de divulgación y valoración del importante patrimonio musical de las procesiones cartageneras. Insiste Belda en llamar la atención sobre lo extraordinario de contar con unos cortejos donde, simultáneamente, puede haber quince o más bandas de música interpretando su concierto itinerante por las calles de Cartagena; algo imposible de concebir en ningún otro sitio y que, quizás por la costumbre, los cartageneros no valoramos en toda su dimensión.

Considera el maestro Belda, con razón, que la música es un pilar fundamental de la estética procesional cartagenera, puesto que, si de orden hablamos, la música es orden rítmico, es la luz que emana de las melodías y armonías, y es el perfume de los sonidos que envuelve todo el cortejo, completando y realzando, de esta manera los tradicionales ingredientes de orden, luz y flor.

Del repertorio tradicionalmente interpretado en nuestra Semana Santa, Belda destaca una marcha genuinamente cartagenera, como Marcha Lenta, de Oliver, algo olvidada últimamente, quizás por su complejidad. Otras marchas, de autores foráneos, han encontrado carta de naturaleza en Cartagena, por adaptarse perfectamente a la manera de desfilar de los tercios de capirotes. De entre todas ellas, junto a Mater Mea, destaca Mektub, de Mariano San Miguel, la que considera que reúne la perfección de valores musicales en aspecto armónico, formal y melódico, música pura, no descriptiva, desarrollada con una gran unidad a partir del motivo inicial de cuatro notas, a la manera como Beethoven articula su Quinta Sinfonía.

Es en esta labor de concienciación y valoración del patrimonio musical de la Semana Santa donde Jaime Belda considera que se debe seguir trabajando. Y es para los procesionistas, y cartageneros en general, una suerte y un privilegio poder contar en ese empeño con una figura de la dimensión de Jaime Belda Cantavella.

José Francisco López.

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Jose Francisco Lopez Martinez